To see a World in a Grain of Sand And a Heaven in a Wild Flower Hold Infinity in the palm of your hand And Eternity in an hour. William Blake
19 févr. 2006
Tugar, tugar, salir a buscar
El hombre siempre busca algo. Parece que no sabe poseer las cosas, solo sabe tenerlas olvidándolas. Piensa atrevidamente el mundo como algo propio y se pierde en él, siempre yendo más lejos, hacia la ceguera que prolongue la búsqueda. Prescinde de la semilla que guardan sus primeros pasos, curiosa semilla de cercanas revelaciones que deja pasar, inadvertidas, al llenar la senda de horizontes que despueblan de sentido sus propios rincones. Así la VIDA es todo lo lejano, lo que pocos descubren y que otros cansados o deprimidos dejan por el sueño confortable que borre sus deseos de búsqueda. Pero el hombre idealiza el significado de ella, lo malinterpreta porque no percibe el gran detalle, que adentro suyo llena un sentido genuino tanto o más valioso que el tesoro adquirido tras navegar por los siete mares.
¿Cómo se complicó tanto el reconocimiento? Lao Tsé dijo muchas cosas sabias que me hacen sentir banal en mi vida, pero que plantean un gran mensaje:
"Alcanza la total vacuidad
para conservar la paz.
De la aparición bulliciosa de todas las cosas,
contempla su retorno.
Todos los seres crecen agitadamente,
pero luego, cada una vuelve a su raíz.
Volver a su raíz es hallar el reposo.
Reposar es volver a su destino.
Volver a su destino es conocer la eternidad.
Conocer la eternidad es ser iluminado.
Quien no conoce la eternidad
camina ciegamente a su desgracia.
Quien conoce la eternidad
da cabida a todos.
Quien da cabida a todos es grandioso.
Quien es grandioso es celestial.
Quien es celestial es como Tao
Quien es como el Tao es perdurable.
Aunque su vida se extinga, no perece."
Todo esto parece clarísmo, pero hay un abismo entre la posibilidad de nacer en ese escenario semántico ¿Es que acaso perdimos lo sagrado?
Una filósfa española, María Zambrano afirma que los seres humanos necesitamos lo sagrado, necesitamos a Dios. Sin él, dice, estamos como sin techo. Yo no sé cómo se teje la mente o los diversos cuerpos de la existencia, pero siento que me hace falta algo de divino y parece que yo misma me lo escondo...
Inscription à :
Publier les commentaires (Atom)
Aucun commentaire:
Enregistrer un commentaire