Una cadencia
flota demasiado alto,
cerca del silencio que no quiero oír.
Bajo ríos de olvido
invento una partitura legendaria;
en su irrealidad terrible
me saca las uñas,
en su ritmo imaginado,
acá,
tan abajo
en el tiempo transcurrido,
me recuerda la muerte de un hijo.
2 commentaires:
mi amor, métase al blog de la violeta parra que tiene una gran novedad, quiero que seas la primera en oirlo.
besos
R
Ni hoy ni mañana obtendremos respuestas de acechar los detalles de la nada. Sería mejor recuperar la habilidad de no andar sujetando y dividiendo los instantes. En los días de nuestra infancia bastaba la magia de estar siendo, y compartían sin conflictos el papel pautado indios, elefantes y manchas de chocolate.
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